JAVIER GOIRI


La versatilidad de la curiosidad.

Mi título universitario dice que soy periodista. Promoción de 2000 de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Pero soy mucho más que eso.

Con 19 años y hasta los 23 trabajé en Radio y Televisión como redactor. (Onda Cero, Telemadrid, Radio Nacional de España y COPE) En esta época aprendí la importancia de una buena historia y cómo hay que contarla y cómo dependiendo del medio hay que adaptar los formatos. Somos consumidores de contenido pero también de formatos.

También descubrí que las estructuras de estas empresas de comunicación estrangulaban la creatividad y ahogaban la curiosidad (salvo excepciones) De manera que con 23 años gasté unos ahorrillos en una cámara de vídeo DVCPRO y una Canon EOS 1 VI (Sí sin la D de digital) y empecé a convertirme en lo que hoy soy. Un artista independiente que emplea cualquier herramienta a su alcance para contar historias que emocionen, bajo un prisma y con un tratamiento personal que sólo un artesano del oficio puede darte.

En estos 25 años como artista independiente no he parado de trabajar para clientes privados, empresas, agencias de publicidad, productoras, entidades públicas, ONG´s en todo tipo de proyectos: Desde una campaña de publicidad hasta un festival de música. Esto me ha permitido investigar y desarrollar una serie de habilidades que me han convertido en un profesional versátil, capaz de trabajar en diferentes condiciones, y fiable a parte iguales. Desde escribir guiones, dirección, dirección creativa, dirección de fotografía… pasando por la edición de vídeo, retoque fotográfico, locución, doblaje, producción, Realidad Virtual, revelado analógico… hasta la entrega final de la pieza que hayamos imaginado.

Pero centremos un poco el tiro. Si me preguntas dónde estoy más cómodo a día de hoy te diría, por orden de preferencia, que como Fotógrafo Senior, Realizador y Dirección de fotografía.

Me encanta trabajar con luz natural y crear imágenes igualmente naturales y desenfadadas, trabajar codo con codo con el cliente para hacer realidad aquello que han imaginado, y por supuesto seguir aprendiendo y seguir curioseando no vaya a ser que en una de estas me especialice en algo.

“El adulto curioso es un niño que ha sobrevivido”